.
en esta carne no han existido arrepentimiento ni hueso
y eres lo único mirado
mi cabeza se entierra en mi corazón para oírte
cada gota de mi sangre transporta tu voz
el cielo no necesita habitaciones
como mis ojos no se cansan de observarte
el pasado es un hilo humedecido con nuestra sangre
máquinas de oxigeno
f.h.
-no vuelvas-